Camino de migas

Historia

 

El Instituto Nacional de Silicosis nace en el año 1970 como respuesta al gran número de afectados por neumoconiosis de los mineros del carbón, patología ligada a la inhalación de polvo de carbón en las minas, cuya actividad en aquellos años, y durante el último siglo, ocupaba a miles de trabajadores.


Fruto de esta situación el Ministro de Trabajo inaugura en Oviedo, el 18 de julio de 1970, el Instituto Nacional de Silicosis (INS), en el edificio creado para tal fin en el área de la Residencia Sanitaria de la Seguridad Social y del Hospital General de Asturias.


El Dr. José García-Cosío González (1909 – 1984), poseedor de un amplio conocimiento sobre las neucomoniosis, recibe el encargo de materializar este proyecto. Él fue el primer director del INS, siendo además jefe del departamento médico. El Instituto así creado tenía su sede en un edificio con siete plantas y treinta camas cada una, el cual incluía también una sala de aislamiento para enfermos de tuberculosis, dotado con una unidad de vigilancia intensiva y con servicios de fisiología respiratoria, radiología, anatomía patológica, cardiologia, análisis clínicos y bacteriología, completados con un servicio de consultas externas. Además del apartado médico, un importante departamento técnico de prevención completaba el conjunto y garantizaba una primera línea de acción que actuase sobre el foco del problema causante de la enfermedad.

 

Tras esta concepción original, el Instituto es declarado Centro Especial de la Seguridad Social en el año 1974, según orden del 25 de abril de 1974, del Ministerio de Trabajo, y reconocido como Unidad de Referencia Nacional mediante resolución de la Subsecretaría de Sanidad y Consumo, perteneciente al Ministerio del mismo nombre, el 21 de marzo de 1991.

 

Con posterioridad, la aprobación de la Ley 31/1995, de 8 de noviembre, de Prevención de Riesgos Laborales, recoge nuevamente este reconocimiento en su disposición adicional segunda, donde se indica que el INS mantendrá su condición de Centro de Referencia Nacional para la prevención médico-técnica de las enfermedades cardiorrespiratorias de origen ocupacional. El Reglamento de los Servicios de Prevención, aprobado por Real Decreto 39/1997 recoge también el carácter de referencia de las guías y publicaciones realizadas por la institución dentro de sus competencias.

 

El Instituto Nacional de Silicosis quedó integrado dentro del complejo hospitalario de Asturias en el año 1990, actualmente denominado Hospital Universitario Central de Asturias (HUCA).

 

Tras la inauguración del nuevo edificio unificado del Hospital Universitario Central de Asturias, en el año 2014, el Instituto Nacional de Silicosis mantiene un edificio independiente para el Departamento Técnico así como un espacio para el servicio médico en las instalaciones del edificio de consultas externas del Hospital Universitario Central de Asturias, quien da soporte al INS en aquellos servicios comunes para ambas instituciones.

 

Además, tras la publicación del Decreto 72/2016, de 23 de noviembre, por parte de la Consejería de Sanidad del Principado de Asturias, el Instituto retoma su independencia constituyéndose como órgano desconcentrado dependiente de la Dirección Gerencia del Servicio de Salud del Principado de Asturias.

 

 

Memorial Dr. García-Cosío

 

El Dr. José García-Cosío González (1909-1984) ha sido, desde su inauguración en el verano del año 1970, el alma mater del Instituto Nacional de Silicosis en cuya memoria, anualmente y desde el año 1.985, se celebra el Memorial que lleva su nombre. El recibió el encargo de hacer realidad el proyecto del Instituto Nacional de Silicosis y a él se debe la moderna concepción y desarrollo posterior de las líneas de trabajo del INS, para el que fijó como objetivos, la asistencia, la docencia, la investigación, la prevención técnica y médica y el asesoramiento sobre la silicosis y demás neumoconiosis, aunando conocimiento científico e investigación de Medicina e Ingeniería en pos de una única meta, la lucha contra la Silicosis..

 

 

Muchas han sido las personas excelsas que han honrado al Instituto con su presencia año tras año, algunas tan ilustres como los Dres. Severo Ochoa o Grande Covián.